Acordaos de los presos: El hermano John Short (II)

El hermano John Short, de 75 años, ha sido arrestado en Corea del Norte por distribuir literatura cristiana. Iba con un colaborador que fue devuelto a China pero él fue arrestado y está actualmente desaparecido. Continuemos considerando su historia:

“Acordaos de los presos, como si estuvierais presos juntamente con ellos” Hebreos 13:3

“El que ama su vida, la perderá; y el que aborrece su vida en este mundo, para vida eterna la guardará” Juan 12:25

Después de la muerte de Mao en 1976, fue posible para el hermano John visitar más regularmente todas las provincias de la China continental y llevar Biblias, literatura cristiana, ropa y ofrendas para creyentes necesitados. Estableció una fiel red de contactos y hubo mucho gozo al ver el compromiso de hermanos locales con la obra del Señor. Fueron encomendados a tiempo completo los hermanos Silas So-Man y su esposa Sarah en 1982. También Thomas Yiu Kwong-Yin en 1993.

En 1997 Hong Kong dejó de ser una colonia británica y su administración fue transferida al gobierno chino. Desde entonces comenzaron a ser presionados y sus labores “monitorizadas”. En Mayo de 1996 John había sido arrestado en China y declarado “persona non grata” por las autoridades comunistas, por lo cual su visa fue revocada. Durante este tiempo su esposa y otros colaboradores continuaron con los viajes hacia el interior de China llevando literatura y ayuda. Dos años después su visa fue restituida y nuestro hermano pudo continuar con su ministerio.

John Short llevaba viviendo 40 años en Hong Kong, y últimamente estaba expandiendo su obra hacia Corea del Norte. Debemos recordar que este país es una dictadura comunista férrea y las libertades individuales están muy restringidas. Como ejemplo, el hermano misionero estadounidense Kenneth Bae lleva 15 meses arrestado en este país por predicar el evangelio, pero el hermano John sabía a lo que iba, como señaló su esposa, y no dejaría de hacerlo aun conociendo los riesgos. Ingresó al país la semana pasada con un colaborador chino y a la agencia de viajes les declaró que su viaje no era sólo turístico. Según la agencia, entregó los detalles de lo que pensaba hacer, es decir, entregar literatura cristiana y predicar según fuera posible. Sin embargo no alcanzó a hacerlo pues fue arrestado en su hotel al constatarse que portaba tratados evangélicos en idioma coreano.

Durante su primer viaje a Corea del Norte hace justo un año, el hermano John había hablado claramente de su fe a las autoridades con las que tuvo contacto y les había leído de su Biblia. Esta vez es evidente que no fue bien recibido. no obstante, como esta historia está en pleno desarrollo, aun no conocemos los reales alcances de los eventos. Un hermano de su asamblea en Australia señaló: “Algunos están diciendo que John fue un estúpido al ir, pero la realidad es que él conocía los riesgos. John estaba preparado para pagar el precio de su amor por el pueblo coreano”. Qué ha de acontecer con nuestro hermano no sabemos, pero podemos y debemos orar por él, por su fortaleza en medio de esta prueba, por su esposa Karen y sus hijos, y por los hermanos en Corea y en China. Que su testimonio anime y haga remecer también a los creyentes en todo el mundo con relación a la fidelidad al Señor y a su obra. –rc