En un mundo donde predominan las desavenencias, la violencia, y prácticas inhumanas, cualquier anhela un mundo mejor. La Biblia promete que habrá paz en el futuro. Lea la promesa bíblica acerca de aquel día.
“Sacaréis con gozo aguas de las fuentes de la salvación” Isaías 12:3

 

Predicábamos en la plaza de un pueblo un día domingo en la tarde. Había vendedores, niños en bicicletas, familias caminando, en fin, todos los ingredientes que siempre se ven en una plaza. La Municipalidad nos permitió ocupar un espacio para dar a conocer nuestro mensaje del amor de Dios. Llamaban la atención dos grupos de jóvenes que, aparentemente bajo la influencia de alguna sustancia, se preparaban para una gresca. Los niños abandonaron el lugar cerca de la pileta. Otros jóvenes en la esquina ya peleaban cuando llegaron oportunamente los carabineros, unos en motocicletas, otros en radiopatrullas y pronto se terminó la situación explosiva.

Después expresamos nuestro pesar por la violencia y la perversidad vista en los jóvenes. Unos hermanos habían dado una vuelta a la plaza con tratados, pero nada de interés hubo en los jóvenes. El cristiano se siente impotente con el rechazo pero se contenta con ser fiel al Señor y continuará predicando el evangelio. Vendrá un día en el futuro cuando acompañaremos a Cristo en su reino, durante el milenio. Los capítulos 11 y 12 de Isaías describen lo idílico de aquel tiempo. “En aquel día dirás: Cantaré a ti, oh Jehová; pues aunque te enojaste contra mí, tu indignación se apartó, y me has consolado” (Isaías 12:1). No había nada de música entre los gritos de los que peleaban en la plaza, pero entre los que son de Jehová, habrá canciones de alabanza. Cada uno que conoce a Dios puede decir, “he aquí Dios es salvación mía; me aseguraré y no temeré; porque mi fortaleza y mi canción es JAH Jehová, quien ha sido salvación para mí” (v.2). La salvación que Dios regala es personal al que la recibe. ¿Alaba Ud. a Dios por haber confiado en Cristo el Salvador y por ende por haber sido salvo?

La alegría ha de prevalecer en aquel día futuro: “Sacaréis con gozo aguas de las fuentes de la salvación” (v.3). La abundancia de agua es signo de la bendición de Dios que como una fuente inagotable suple todo lo que el ser humano necesita. No habrá nada de escasez. La apreciación por el Señor en las circunstancias pacíficas que prevalecerán cuando Cristo esté reinando producirá alegría y contentamiento. “Y diréis en aquel día: Cantad a Jehová, aclamad su nombre, haced célebres en los pueblos sus obras, recordad que su nombre es engrandecido. Cantad salmos a Jehová, porque ha hecho cosas magníficas; sea sabido esto por toda la tierra” (vv.4-5). Mientras esperamos que Cristo venga a buscar a su Iglesia seguiremos haciendo célebres sus obras porque ha hecho cosas magníficas. –daj

Lectura Diaria:
Exodo 8:1-32 [leer]
/Salmos 38:1-39:13 [leer]
/Hechos 3:1-26 [leer]